F I T O T E R
A P I A P A R A C A D A D O L E N C I A
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A L E R G I
A S P R I M A V E R A L E S
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Con la llegada de la
primavera, empezamos a ver una figura que cada vez es más frecuente a nuestro
alrededor, el alérgico al polen. Es fácil reconocerlo gracias a una serie de
señales delatoras, siempre lleva en la mano un pañuelo, los ojos llorosos y
sufre continuos ataques de estornudos. Además este año, las temperaturas
templadas y la ausencia de lluvias están favoreciendo la floración
anticipada de algunas plantas, con lo que se está experimentando un aumento
significativo de determinados pólenes alergénicos.
Para este año, la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica
(SEIAC), prevé que aproximadamente el 18% de la población española (unos 7
millones de personas) padecerá algún tipo de proceso alérgico. Dentro este
informe, el tipo de alergia que padecen más personas, con un total de
afectados del 10,1% es la fiebre del heno, mientras que el asma afecta a un
4,9% de la población, la urticaria a un 3,8% y la dermatitis a un 2,6%. Y
esto sólo es en España; si consideramos todo el mundo, las cifras de
personas que padecen fiebre del heno resultan alarmantes.
A través de este artículo podrá conocer más en profundidad las causas y
los síntomas que desencadenan las alergias primaverales, también descubrirá
cómo tratarlas e incluso prevenirlas utilizando métodos terapéuticos
naturales, absolutamente seguros y probados científicamente, a base de
vitaminas, minerales, hierbas medicinales y otras sustancias naturales, así
como un control de la dieta. Una buena razón para que lo lea a fondo es que
cada uno de nosotros puede desarrollar una alergia en cualquier momento, por
lo que conocer esta enfermedad puede resultar esencial para su control.
Los pólenes y el sistema inmunitario:
Cuando hablamos de la fiebre del heno, también conocida con el nombre de
rinitis alérgica o alergia estacional, nos estamos refiriendo a una reacción
alérgica que suele darse durante la primavera, y que cursa con picor y
lagrimeo en los ojos, congestión nasal, rinorrea y estornudos repetidos, en
casos graves puede ir acompañada de dificultad respiratoria y asma. La causa
es una respuesta errónea y excesiva del sistema inmunitario frente a
sustancias presentes en el aire inhalado, principalmente polen y polvo, aunque
también cualquier otra sustancia reconocida como extraña y potencialmente
peligrosa para el organismo; estas sustancias reciben el nombre de alergenos.
El primer encuentro del sistema inmunitario con un alergeno no produce síntomas.
Los macrófagos (células que forman parte de las defensas corporales)
degradan al alergeno y crean anticuerpos específicos frente al mismo, de modo
que en posteriores encuentros con dicho alergeno se produce su reconocimiento
y se desencadenan una serie de procesos en cascada, que conducen a la liberación
de determinadas sustancias químicas que reciben el nombre de "mediadores
alérgicos", entre ellas destaca la histamina.
La histamina, una vez liberada, es transportada hacia una serie de células,
localizadas en diferentes órganos del cuerpo, que poseen receptores específicos
para ella. La unión de la histamina a sus receptores desencadena a su vez,
una respuesta en los diferentes tejidos que se manifiesta por los síntomas alérgicos
tan bien conocidos por todos.
Muchos de los síntomas alérgicos se deben a estas moléculas liberadas, en
concreto la actividad de la histamina está relacionada con los siguientes síntomas:
EFECTOS
DE LA HISTAMINA SOBRE EL ORGANISMO
ACTIVIDAD |
SÍNTOMAS |
Contrae los
bronquios |
Dificultad
respiratoria (pitos) |
Dilata los
vasos sanguíneos |
Enrojecimiento
local en los lugares de introducción del alergeno en el organismo |
Aumenta la
permeabilidad capilar |
Hinchazón
local de los tejidos por salida de líquidos desde los capilares |
Estimula
la secreción de moco en las vías respiratorias |
Congestión
nasal |
Estimula
las terminaciones nerviosas |
Picor y dolor
local en los lugares de contacto con el alergeno |
Se desconoce el por qué del comportamiento erróneo del sistema inmunitario,
pero lo que sí se sabe con seguridad es que la posibilidad de padecer fiebre
del heno depende de una predisposición genética, de una debilidad local en
los tejidos y del grado de exposición a los pólenes. La exposición crónica
a cualquier sustancia a la sea sensible, puede perjudicar no sólo física,
sino también emocionalmente a la persona.
Síntomas relacionados con las alergias primaverales:
La aparición y el tipo de síntomas que acompañan a las alergias, están
relacionados con la vía de penetración del alergeno en el organismo; en el
caso de las alergias primaverales, al inhalar los alergenos, los síntomas que
aparecen son de tipo respiratorio.
Los pólenes y esporas de las plantas son transportados por el viento y son
inhalados por la persona alérgica, estimulando un efecto local en las vías
respiratorias. El resultado final del proceso, es una respuesta inflamatoria
en diferentes tejidos del tracto respiratorio. La sintomatología suele ser
leve y de corta duración, afectando casi exclusivamente a la nariz y ojos;
pero en personas más sensibles pueden darse cuadros más severos con afectación
de la función respiratoria.
- Tracto
respiratorio superior: A nivel nasal, se produce picor, estornudos y
congestión nasal; mientras que a nivel ocular, se produce picor,
lagrimeo y fotofobia.
- Tracto
respiratorio inferior: Se produce tos, dificultad respiratoria
(disnea), respiración sibilante (pitos) e incluso crisis asmáticas por
obstrucción de los bronquios.
Si el alergeno llega a sangre puede desembocar en una crisis anafiláctica, en
la que el sistema inmunitario responde de manera exagerada y que puede poner
en peligro la vida de la persona.
Tratamiento convencional de las alergias primaverales:
El tratamiento primordial sería evitar el polen o las esporas causantes de
las alergias primaverales, pero es evidente que prácticamente no se puede
evitar el alergeno, ya que sería necesario trasladarse a una zona libre de
tales partículas. Sin embargo, sí podemos decir que hay diferentes formas de
reducir el problema tanto en sus síntomas, como en la tendencia a padecerlos.
Una vez conocido el proceso que desencadena la alergia y los síntomas que
aparecen como consecuencia, estamos seguros que deseará saber qué puede
hacer usted al respecto. El principal problema, desde nuestro punto de vista,
es que los tratamientos empleados habitualmente por los médicos se limitan a
combatir los síntomas; es totalmente comprensible que el primer paso sea
enfrentarse a dichos síntomas, puesto que lo primero que desea una persona
que sufre alergia es sentirse mejor, pero para que el tratamiento sea más
efectivo hay que tener en cuenta otros aspectos.
Uno de los puntos claves en el tratamiento natural de las alergias, y que lo
diferencia del tratamiento convencional, es que tiene en cuenta e intenta
disminuir la tendencia a padecer alergia. El principal inconveniente del
tratamiento tradicional de la alergia es que no trata de corregir la tendencia
alérgica de la persona, para así lograr reducir la incidencia y la
manifestación de los síntomas, sólo trata los síntomas; y el segundo
inconveniente, son los numerosos efectos secundarios que aparecen con los
medicamentos antialérgicos convencionales.
Vamos a estudiar brevemente el tratamiento convencional de la alergia, para
después comentar las excelentes alternativas que aporta la medicina natural.
En primer lugar, uno de los grupos de fármacos más empleados son los antihistamínicos
que bloquean los efectos de la histamina, uniéndose a los receptores específicos
de esta sustancia, como consecuencia cuando se libera la histamina y va a las
células que contienen sus receptores, éstos ya están ocupados y así se
evita que actúe. El principal inconveniente de estos fármacos son sus
efectos secundarios (somnolencia en mayor o menor grado, y problemas
digestivos), así como el hecho de que no disminuyen la tendencia alérgica de
la persona.
También es frecuente el uso de glucocorticoides con acción
antiinflamatoria, que reducen la contracción de los bronquios y la congestión
nasal. Estos fármacos tienen unos efectos secundarios graves, incluso a dosis
terapéuticas, por lo que se emplean sólo a nivel local (inhaladores
bronquiales o descongestionantes nasales), pero aún así una pequeña fracción
del medicamento puede pasar a sangre.
Otro fármaco bastante utilizado en el tratamiento de los procesos alérgicos
es el cromoglicato disódico. La acción de este fármaco consiste en
evitar que la histamina sea liberada desde las células que la contienen
(estabiliza las membranas de los mastocitos impidiendo su degranulación). La
limitación más importante de este fármaco es que no sirve de nada una vez
que la histamina se ha liberado y provoca efectos secundarios en las zonas de
contacto, principalmente irritación en la garganta y dolores de cabeza.
En cuanto a la desensibilización por medio de vacunas, es un método
cada vez menos popular debido a su baja tasa de éxito y a sus limitaciones.
Las vacunas sólo se pueden administrar durante 6 años como máximo y son
pocas las personas que experimentan mejoría cuando el tratamiento cesa.
Tratamiento natural de las alergias primaverales:
El tratamiento natural de la dieta abarca diferentes aspectos que vamos a
comentar en los apartados siguientes:
- Dieta
Existen muchos
alimentos a los que una persona no es alérgica pero que pueden agravar
su problema. Entre ellos destacan la leche y los productos lácteos
debido a que estimulan la producción de moco y además contienen proteínas,
como la caseína, que son difíciles de digerir completamente; también
contienen cantidades importantes de ácido araquidónico, cuya función
en el organismo es producir sustancias con actividad inflamatoria.
Otros alimentos
cuyo consumo no está recomendado en caso de padecer alergias
estacionales son: chocolates, carnes rojas, grasas hidrogenadas como las
margarinas, alimentos fritos, azúcar refinado y todos los productos que
lleven polen en su composición (jalea real, polen y miel).
- Fitoterapia
Podemos encontrar
en la naturaleza un gran número de plantas medicinales beneficiosas en
el tratamiento de las alergias estacionales; de hecho, muchos de los
medicamentos convencionales derivan de compuestos presentes en dichas
plantas.
Entre las plantas
recomendadas destacamos:
- Helicriso
o Sol de oro (Helicrysum italicum R.): Tiene propiedades
antihistamínicas que ayudan a contrarrestar los síntomas alérgicos.
- Raíz de
regaliz (Glycyrrhiza glabra L.): La raíz de
regaliz está muy indicada en el tratamiento natural de las
alergias, gracias a una serie de principios con actividad
antiinflamatoria similar a la de los glucocorticoides; por otra
parte, estas sustancias también estimulan la acción de los
esteroides naturales presentes en el organismo. Su uso en el
tratamiento de la alergia iría encaminado a poder reducir las dosis
de los glucocorticoides administrados externamente y así disminuir
el riesgo de aparición de los efectos secundarios de estos fármacos.
- Escutelaria(Scutellaria
baicalensis L.): Esta planta, originaria de China, contiene una
serie de principios activos cuya acción es similar a la que ejerce
el cromoglicato disódico, es decir, impide la liberación de
histamina; además contiene sustancias antioxidantes que neutralizan
los efectos tóxicos de los radicales libres.
- Flores
de saúco (Sambucus nigra L.): Están especialmente
indicadas para el tratamiento de cualquier inflamación del tracto
respiratorio superior.
- Efedra(Ephedra
sinica S.): Esta planta recibe también el nombre chino de Ma
Huang. El principal efecto terapéutico de ella es su capacidad
broncodilatadora y antialérgica, debido a su contenido en
alcaloides de estructura química similar a la Noradrenalina, que
bloquearían los efectos de este neurotransmisor en el organismo.
- Hisopo (Hyssopus
officinalis L.): Contiene aceite esencial y compuestos químicos
con actividad expectorantes, muy útiles para ayudar a
descongestionar las vías respiratorias.
- Aromaterapia
Puede darse un
masaje en los senos nasales para aliviar la congestión nasal con aceite
esencial de lavanda, tomillo dulce, hisopo, ciprés o eucalipto y aceite
de almendras dulces. Si lo prefiere puede utilizar estos mismos aceites
esenciales para hacer inhalaciones.
Es muy
importante, cuando maneje aceites esenciales, que éstos sean de calidad
y que en ningún caso exceda el número de gotas recomendados por los
especialistas, ya que los aceites esenciales contienen sustancias a
elevadas concentraciones y en dosis altas, pueden provocar efectos no
deseados.
- Homeopatía
La homeopatía se
basa en que si una sustancia es capaz de provocar una determinada
enfermedad, la misma sustancia en dosis muy pequeñas (infinitesimales)
sería capaz de estimular los mecanismos del organismo para así
curarse; por lo que ahora que estamos en época de alergias, si se
administra los pólenes de las gramíneas o de los árboles responsables
de la enfermedad, a dosis infinitesimales se puede provocar la
desensibilización progresiva de la persona.
Además exiten
muchos remedios homeopáticos para aliviar los síntomas como ojos
llorosos, congestión nasal y estornudos violentos, como Alium cepa,
Arsenicum album y Sabadilla, que tiene muy buenos resultados.
En este caso le
recomendamos que se ponga en manos de un médico homeópata para que
estudie su caso y le ponga un tratamiento con remedios homeopáticos
libres al 100% de efectos secundarios.
- Vitaminas y
minerales
Tomar suplementos
de determinadas vitaminas y minerales puede serle de ayuda:
- Vitamina
C: Esta vitamina posee acción antioxidante muy útil para
combatir lo efectos de los radicales libres sobre el organismo, de
modo que es capaz de contrarrestar la debilidad de los tejidos,
factor que como hemos comentado anteriormente, puede predisponer a
padecer alergia. Además neutraliza a la histamina y estimula al
sistema inmunitario para que recupere su correcto funcionamiento.
- Vitamina
E: Ayuda a disminuir la síntesis de las sustancias
inflamatorias responsables de los síntomas con que van acompañadas
las alergias primaverales.
- Beta-carotenos:
Son pigmentos naturales localizados en todos los vegetales de color
amarillo, naranja o rojo. También son antioxidantes, por lo que
contrarrestan la inflamación y protegen a los tejidos; por otra
parte, los beta-carotenos se transforman en el organismo en vitamina
A, la cual desempeña un papel importante como protector de las
membranas mucosas, es decir, protege y repara las membranas
respiratorias que estén dañadas como consecuencia de la alergia.
- Magnesio:
Este oligoelemento es capaz de relajar la musculatura bronquial
lisa, de modo que mejora la ventilación pulmonar.
- Quercitina:
Se trata de una sustancia extraída de una planta (Sophora
japonica L.) y que es capaz de reducir o evitar muchos procesos
inflamatorios en los que interviene la histamina.
- Otras
terapias naturales:
Existen otras
terapias naturales que puede encontrar de gran utilidad en el
tratamiento de todas las molestias relacionadas con las alergias
primaverales:
- Acupuntura:
Obtiene excelentes resultados para aliviar la congestión nasal y
todos los síntomas asociados a una inflamación
- Medicina
Tradicional China: Existen fórmulas especialmente indicadas
para tratar este problema que cuentan con la experiencia de muchos años
de tradición con muy buenos resultados. Póngase en manos de un
especialista cualificado
- Digitopuntura:
Se puede presionar sobre la membrana que se encuentra entre los
dedos pulgar e índice durante 1 minuto, para controlar
especialmente las situaciones de estrés que suelen agravar los síntomas
de las alergias primaverales. Aunque no debe practicar este método
durante el embarazo.
- Baños
nasales: Para contribuir a una buena limpieza de las fosas
nasales le recomendamos que se lave todos los días dichos conductos
con agua marina. Puede adquirir preparados comercializados a base de
agua marina o prepararlo usted mismo con 1/2 cucharadita de sal
marina y agua tibia, utilizando un aparato llamado Lota que venden
en herboristerías y tiendas de productos naturales relacionados con
la salud.
Consejos finales para personas alérgicas:
- Para
finalizar queremos darle una serie de consejos, no pretendemos con ellos que
se obsesione con el problema sino que sepa identificar cuáles son las
situaciones normales y los hábitos de conducta que debe evitar o modificar,
para mejorar su calidad de vida y prevenir en lo máximo posible la exposición
a los alergenos.
- La medida
fundamental que hay que tomar es evitar el contacto con la sustancia
desencadenante del proceso (alergeno).
- La aparición
de los síntomas depende del tipo de polen que sea la causa de la fiebre
del heno, en general la época de floración empieza alrededor del mes
de febrero y acaba en agosto, por eso es importante conocer cual es la
época de floración de la planta responsable.
- Infórmese de
las concentraciones de pólenes a diario.
- No respire por
la boca, es mejor hacerlo por la nariz ya que en ésta existen filtros
naturales donde quedan retenidas partículas que se encuentran en
suspensión en el aire y se impide que lleguen a los bronquios.
- Evite los
lugares con mucho polvo, como por ejemplo las canchas de tierra donde se
practican determinados deportes y también hay que tener cuidado cuando
hace mucho viento ya que éste arrastra numerosas partículas en
suspensión.
- Reduzca en lo máximo
posible el polvo dentro del hogar. Para ello no tenga en casa objetos
que acumulen el polvo como alfombras, moquetas, tapices, grandes
cortinajes que sean difíciles de lavar, muñecos de peluche o de trapo,
almohadas de plumas y edredones nórdicos de plumas.
- Conviene que el
colchón lleve una funda de plástico o al menos, que se pase el
aspirador por él una vez al mes.
- No utilice
escobas o cepillos para barrer pues remueven el polvo y no lo eliminan,
en su caso utilice un paño ligeramente humedecido y sólo emplee la
aspiradora si ésta tiene un buen sistema para filtrar las partículas
de polvo.
- Evite
permanecer en el mismo lugar donde se está efectuando la limpieza de
las habitaciones, pero si no les queda más remedio que realizar la
limpieza de la casa a usted mismo, debe usar una mascarilla o un pañuelo
humedecido.
- Mantenga las
puertas y las ventanas cerradas, especialmente durante el día. Ventile
la casa al atardecer cuando los niveles de pólenes en el ambiente son
menores.
- Evite dormir
con las ventanas abiertas durante la noche, pues de madrugada muchas
plantas liberan polen y su contenido en el ambiente aumenta.
- Evite tener
animales con pelo o plumas dentro de casa, así como el uso de abrigos
polares de plumas.
- Evite los
olores fuertes: alimentos como la cebolla o el vinagre, productos de
limpieza del hogar, perfumes, desodorantes, lacas, disolventes,
pinturas, etc.
- Realice
ejercicio para fortalecer los pulmones, el más indicado es la natación
porque se reduce el contacto con polvo y otras sustancias presentes en
el ambiente que son perjudiciales, pero si prefiere dar un paseo el
mejor momento para hacerlo es por la noche o a primera hora de la mañana.
- Use gafas de
sol para evitar la agravación de las molestias oculares.
- Use aparatos de
aire acondicionado con filtros adecuados.
- Evite la
deshidratación, para mantener un buen flujo de aire es bueno
fluidificar el moco que hay en los bronquios bebiendo al menos un litro
y medio de agua al día.
- Evite el estrés.
La tensión nerviosa puede hacer que empeore su estado de salud y
desencadenar crisis respiratorias, por eso es bueno practicar alguna técnica
de relajación.
- Lleve una dieta
en la que se excluyan aquellos alimentos que aumenten la producción de
moco, así como café, bebidas estimulantes, bebidas alcohólicas y
tabaco; y aumente el consumo de frutas y verduras frescas.
Advertencias:
El tratamiento con cualquier medicamento recetado para combatir el asma o
cualquier reacción alérgica, no debe interrumpirse sin el consentimiento y
la supervisión de un médico, ya que muchos de ellos pueden desencadenar
crisis alérgicas graves u otros efectos secundarios, si su administración
cesa bruscamente.
Si desea emplear la medicina natural o alternarla con la medicina
convencional, consulte a su médico antes, para que reajuste las dosis de los
medicamentos que esté tomando, pero nunca decida suspender el tratamiento
convencional e iniciar uno alternativo por iniciativa propia.
ÍNDICE
DE ENFERMEDADES
Esta información ha sido extraída del cd rom Prevenir y Curar Enfermedades y Dolencias
Información de este CD ROM
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