Tropeoláceas

Toda la planta

Anual suculenta, débil, lampiña, de tallos de hasta 30 cm de largo.

Perú

Hasta 35 cm 

Alternas, no del todo orbiculares, de 30 cm de diámetro, flácidas y de largos peciolos.

Solitarias, muy coloridas y vistosas, abracando desde el amarillo hasta el anaranjado intenso.
El cáliz posee cinco sépalos y la corola cinco pétalos algo desiguales de hasta 3 cm de largo.
Florece caso todo el año dependiendo de la climatología del lugar, pero preferentemente desde junio hasta noviembre.

Carnosos, de color blanco y de 12 mm de ancho.
Propagación: Por semillas al aire libre desde marzo hasta mayo.

Se encuentra muy cultivada en huertos y jardines proliferando fácilmente en campos a los que no les falte humedad. Prefiere los lugares algo sombreados. 

Aceite esencial...........0,03%
- tiocinato de bencilo derivado de la glucotrepeolina
- Ácido ascórbico
- isoquercitina
- helenina

Afrodisíaco
antianémico
antibiótico (gracias a su contenido en tiocinato de bencilo)
antiescorbútico
antinefrítico
aperitivo
depurativo
diurético
expectorante
laxante
purgante (Sus frutos secos)
vulnerario
emenagogo
Tónico 

Afecciones de vías urinarias
Alopecia
Avitaminosis
Bronquitis
Cistitis
Resfriados
Tonificar del cuero cabelludo
Nefritis
Infecciones de las vías urinarias
Gripe
Cabellos con caspa (Decocciones o champús)
Traumatismos (Hojas en forma de cataplasmas)
Contusiones (Hojas en forma de cataplasmas)

Por vía interna y a grandes dosis puede iiritar el estómago debido a su contenido en tiocinato de bencilo

Polvo de semillas
Hasta 2 g en varias veces por día

Alimento
Fuente de vitamina C, es muy útil en ensaladas. Las personas propensas a padecer ataques epilépticos deberían de comerla cruda cada día. Es un buen antiespasmódico

Maceración
Vamos a referirnos a la manera en que la recomienda el Dr. Luis G. Cabrera de México: "La planta debe emplearse en forma  de maceración de los tallos, hojas y semillas, machacándolas previamente y dejándolas durante 12 horas en agua (dos o tres gramos para 15 de agua), para tomar esa cantidad en ayunas durante dos o tres días"

Tintura madre
Hasta 30 gotas tres veces por día

Contra la tos, tosferina, catarro y bronquitis
Machacar 4 hojas frescas y ponerlas a macerar en 3/4 de litro de agua fría durante un mínimo de 12 horas. Filtrar
Posología: beber uno o dos vasos al día preferiblemente con una cucharada de buena miel.

Heridas y úlceras, llagas
Las hojas frescas de la capuchina aplicadas en forma de cataplasma son antisépticas, impidiendo la infección de heridas y úlceras y acelerando su cicatrización.

Aftas, orzuelos y fuegos en la boca
El jugo de las hojas y sus flores se aplica en las zonas afectadas

Colesterol en la sangre elevado, enfermedades del hígado, riñones, próstata y vías urinarias
Tomar 20 gotas de tintura de capuchina en medio vaso de agua tres veces al día.
Esta misma tintura a manera de fricciones en uso externo alivia la "makhurkha" o dolor muscular y el dolor de huesos

Insecticida contra moscas, pulgas...
A unos amigos míos que crían perros les recomendé que sembraran capuchinas alrededor de las perreras con lo cual consiguieron eliminar el gran problema de las pulgas en verano. 
También la infusión de esta planta es muy útil para rociar lugares donde existen moscas y pulgas. Así mismo puede aplicarse en el cuerpo de los animales que contengan garrapatas y otros parásitos. No usar en las vacas ya que se lamen y es tóxica

Pulmonía, inflamación de riñones, vejiga y vías urinarias
Machacar 4 hojas frescas y ponerlas a macerar en 3/4 de litro de agua fría durante un mínimo de 12 horas. Filtrar
Posología: beber todo el contenido repartido a lo largo del día al día preferiblemente con una cucharada de buena miel.

Comentario del doctor Monardes (1578):
 "La hoja majada y puesto el zumo della en qualquier herida fresca la consolida y sana, curandola por la primera intencion: y usan della ni mas ni menos que se usa del Tabaco, pa heridas rezientes, lavando con el zumo y poniendo el borujo encima"

Comentario del padre Cobo en 1653 desde Perú: 
"Los Indios le llaman ticsau, y los Españoles Mastuerzo de las Indias. Los Indios se dan un baño con el cocimiento desta yerba cuando se sienten con dolor de cabeza, y si el dolor es en todo el cuerpo, dan baño en todo el así con la hojas como con las rayzes; y si tienen postillas, granos y otras infecciones del cuero, quedan libres dellas mediante el baño: y el cozimiento hecho con vino limpia y deseca las llagas"

Fray Juan Navarro
Le dio el nombre de "mastuerzo del Perú" debido a que las hojas y las flores tienen un sabor picante parecido al del berro. Y en su manuscrito "Jardín Americano" describe así los ejemplares de capuchina mexicana: "Pelonxotitl, o Mastuerzo del Perú, porque de allá se trajo. En España lo llaman la capuchina, según lo oí decir a don Vicente Cervantes, catedrático de botánica en la ciudad de México. Es caliente y seco casi en cuarto grado. Sus flores en ensalada, son útiles a los estómagos fríos o adoloridos por ventosidad; majadaas y aplicadas al pecho son contra la tos. Las hojas y flores majadas se destilan en la alquitara con unos granos de alumbre, y con esto se lavan las llagas aunque estén en la boca, y es tan bueno como el agua luminosa"

Su cultivo
De fácil cultivo incluso en terrazas y jardines a manera de enredadera. Muy rica en vitamina C
Algunas perreras siembran la capuchina en sus vallas para preservar a los perros de piojos y otros parásitos
En nuestro jardín debemos sembrarla dejando espacio suficiente para que se extienda, ya que de lo contrario invadirá a otras plantas.
En maceta también la podemos sembrar si bien no se hará tan grande como en suelo directo. En los balcones con una maceta lo suficientemente grande puede dar un toque de color al balcón si la dejamos que se enrede en la barandilla.
No es recomendable regarla en exceso ya que ello provocaría que se pudrieran sus raíces y muriera la planta. Un riego a la semana será suficiente.

Recolección
A mediados de verano, antes de que florezcan ya que poseen más vitaminas. Recolectar las hojas durante la tarde a última hora.

Comentario personal (Joan Sisa)
La primera vez que llegó a mis manos un ejemplar del libro "La vida secreta de las plantas" tuve una reacción algo extraña ya que despertó en mí un sentimiento adormecido hacia lo que podríamos denominar el alma de las plantas. El tema de la comunicación de las plantas o del reino vegetal con el hombre siempre me fascinó y por supuesto siempre he creído en ello. ¿Cómo se comunican las plantas con nosotros? ¿Cómo nos dicen la manera en que pueden ayudarnos. Ellas no tienen el mismo lenguaje que nosotros, no hablan como nosotros. Su manera de comunicarnos algo es así de sencilla: se acercan a nuestro barrio, jardín, huerto. Luego intentan llamar la atención mediante sus colores y formas, sus fragancias, etc. Lo demás depende de nosotros. Podemos pasar cien veces por un mismo lugar de nuestro jardín por ejemplo y no darnos cuenta por ejemplo de que está atiborrado de capuchinas salvajes que no sabemos ni como han llegado hasta ahí. El caso que les voy a relatar es totalmente verídico y lo hago con la sola intención de que les haga reflexionar del porque a veces nos invaden determinadas especies hasta casi la misma puerta de nuestra casa.
España, islas Baleares, Ibiza, la isla mediterránea situada más al sur del archipiélago. 1981. Pueblo de San Juan del norte de la isla. Allí vive una gran amiga mía que es de nacionalidad griega con su hija Felisa de 17 años, la cual sufre diariamente de tres y cinco ataques epilépticos. Poco podía hacer yo por ayudarla, apenas unas infusiones de acción antiespasmódicas. Un día me llamo Katy, su madre para decirme que se había cambiado de casa en el mismo pueblo de San Juan. La fui a visitar. La casa era de una sola planta estaba rodeada de un precioso jardín. Katy me enseñó la casa y el jardín trasero en el cual había dos o tres capuchinas pequeñas. Al marchar de la casa era casi de noche pero pude observar varios arbustos de unos 2 metros de altura de hierba luisa. Era primavera y empezaban a salir sus hojas. Un mes después volví a visitarla y Katy me comentó muy asombrada que las capuchinas no sólo habían crecido considerablemente si no que habían trepado por los muros de la casa llegando hasta las ventanas. Al volver a mi casa me dediqué a escudriñar varios libros y me quedé estupefacto: tanto la capuchina como la hierba luisa estaban recomendadas contra la epilepsia pos su acción antiespasmódica sobre el sistema nervioso. Al día siguiente acudía a verla de nuevo y no me lo pensé dos veces: "Katy, tienes que dar a tu hija infusiones periódicas de hierba luisa y capuchina, además de ponerle hojas y flores tiernas de capuchina en las ensaladas". Le comenté el porqué y empezó a seguir mis consejos. El resultado, todo y no obteniéndose una curación completa en su hija fue sorprendente: la niña pasó de 3 y 5 ataques diarios a uno y muchas veces hasta ninguno por día." Que el lector saque sus propias conclusiones...

Otras especies relacionadas
Tropaeolum tuberosum Ruiz y Pavón. 
También llamada cubios, nabios, añú. Esta especie es de la zona andina tropical de Sudamérica, que crecen entre los 2.500 y 3.500 m de altitud, sobre todo en Colombia, Perú y Ecuador. Se conocen diferentes variedades. Respecto a estas especies el padre Cobo comenta lo siguiente: "Tiene virtud esta raíz de reprimir el apetito venéreo, según dicen los Indios; y así afirman que mandaban los reyes incas del Perú llevar la copia de este mantenimiento a sus ejércitos, para que comiendo de él sus soldados, se olvidasen de sus mujeres. El cocimiento de estas raíces tomado en ayunas con azúcar, quita la pecguguera, y hecho el cozimiento con estas raíces y las del perejil y bebido en ayunas con zumo de lima, quiebra la piedra de los riñones y de la vejiga"
Como bien indica su nombre, posee unos tubérculos de forma cónica, que son la parte medicinal de la planta. Los tallos son suculentos y de color rojizo, presentando las flores una corola de 1 cm de largo, de color rojo morado purpúreo.  Se ha encontrado entre su principios activos mirosina, esencia de mostaza benzílica. Los tubérculos son comestibles y de un sabor intenso a hierro. Sus hojas tiernas, al igual que la capuchina anteriormente mencionada, se consumen crudas en ensaladas. Esta planta está considerada diurética utilizándose sus tubérculos en tratamientos tópicos de eccemas e irritaciones de la piel

 Joan Sisa para ecoaldea

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